En el artículo de hoy te explicamos todo lo que tienes que saber para elegir el mejor material para tu porche, terraza, patio o balcón.
¿Empezamos?
1 . GRES PARA EXTERIOR: El gres porcelánico es una gran opción para los suelos exteriores. Es resistente a las altas y bajas temperaturas, tiene una gran durabilidad y no se raya con tanta facilidad como otros tipos de suelos.
2 . CEMENTO: Los suelos de cemento pulido o microcemento son muy impermeables. Aportan frescura y contemporaneidad y su mantenimiento es muy sencillo. Con el tiempo pueden aparecer fisuras, pero pueden darle un aire más vintage y/o industrial.
3 . MADERA NATURAL: La madera genera una sensación de confort y naturalidad y tiene una gran capacidad de aislamiento. Pero los cuidados de este material son muchos ya que es muy vulnerable a las inclemencias del tiempo, sobre todo a la humedad. Las mejores maderas para exterior son las tropicales, ya que se trata de variedades duras, densas y con una gran cantidad de aceites naturales.
4 . MADERA ARTIFICIAL: Se trata de una alternativa muy práctica. Las tarimas de composite, están en alza. Su larga vida útil, el hecho de que son sostenibles y sencillas de mantener son algunas de sus ventajas. Son una alternativa sostenible a las maderas tropicales, gracias a su composición de materiales de origen reciclado –como virutas y serrines–, aglomerados con distintas resinas y polímeros. Un material que contribuye así a reducir la tala de bosques en países en los que no siempre ésta se realiza de forma controlada. Mientras que la madera precisa de mantenimiento anual, las tarimas sintéticas no se deterioran por efectos del sol ni de la humedad; se conservan en perfectas condiciones y mantienen inalterables su apariencia y color. También hay que tener en cuenta sus propiedades antideslizantes y que no se astillan ni fisuran con el uso.
5 . PIEDRA Y MÁRMOL: Existen muchas variedades de piedra, entre las más usadas, las piedras encaladas, las lajas, losas y la pizarra. Según el tipo de ambiente, elige piedras más uniformes o más irregulares y siempre con una protección antideslizante. Los suelos de piedra natural aportan calidez, resistencia y durabilidad. Además, son muy fáciles de limpiar. El mármol es elegante y sofisticado. Aunque existen distintos acabados, es aconsejable no pulirlo para evitar resbalones. El mármol es una piedra natural y por tanto es único. Resiste muy bien a la humedad y las temperaturas. Eso sí, requiere un buen mantenimiento con productos específicos para que mantenga sus propiedades, así que olvídate del vinagre.
6 . CÉSPED ARTIFICIAL: El césped artificial es muy realista. A mayor calidad, mayor realismo. Este tipo de césped no requiere tratamiento, no propaga la llama, no necesita de relleno ni riego, ni produce alergias. No produce abrasión y es compatible con mascotas. Además, tiene una alta resistencia al desgaste y es un producto de larga duración. Una de las ventajas del césped artificial es que se puede instalar en cualquier superficie y además es muy fácil de hacerlo sobre todo sobre hormigón y baldosa.
7 . BARRO O TERRACOTA: El suelo de barro siempre consigue un ambiente más rústico e incluso artesanal debido a las imperfecciones que forman sus baldosas. Como desventaja cabe destacar que son sensibles a las manchas.
Si el espacio es pequeño solemos recomendar usar un único pavimento para dar una sensación de amplitud, pero si dispones de un espacio exterior muy grande se pueden usar varios materiales y hacer composiciones muy creativas.
¡Esperamos que os haya sido de utilidad esta información y que os animéis a
renovar vuestro espacio exterior!
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